A 33 años de la caída del telón de acero
Hoy, 9 de noviembre, se cumplen 33 años de uno de los hechos históricos más relevantes del siglo pasado.
El telón de acero fue, como describen grandes historiadores e internacionalistas, una línea imaginaria que dividió a Europa ideológicamente desde el final de la Segunda Guerra Mundial, hasta la caída del muro de Berlín.
Este muro, levantado por el gobierno soviético de la Alemania Oriental, se encargó de poner límites físicos entre territorios controlados por los aliados occidentales y la Unión Soviética.
El 13 de agosto del año 1961, los berlineses amanecieron con esta infraestructura que los soviéticos levantaron de la noche a la mañana. La principal razón por la cual se levantó este muro fue la deserción de habitantes de la Alemania Oriental hacia la Occidental, en búsqueda de una mejor calidad de vida, entre tantas cosas.
Esta acción deliberada de los soviéticos se tomó como una maniobra de imponer autoridad y demostrar mayor poderío que sus adversarios políticos, desde el punto de vista propio. Mientras tanto, el resto del mundo, vió este accionar como una muestra de pérdida de persuasión y confianza entre sus gobernantes, su sistema y sus habitantes.
En el año 1989, un día como el de hoy, el muro cayó, tras malos años de gestiones rusas y luego de las nuevas medidas que el gobierno de Mijaíl Gorbachov tomó para tratar de restaurar una Unión Soviética deteriorada por los años y por su propio sistema.
Este día, para muchos analistas internacionales significó el final de la Guerra Fría, mientras que algunos indican que el final de ésta se dió dos años después, con la caída de la Unión Soviética.
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