Cuba aprueba el matrimonio igualitario

Tras consolidar la revolución castrista en el 1959, Cuba rompe vínculos con su pasado y aprueba con el 67% de los votos al matrimonio igualitario y la subrogación de vientre.

La revolución cubana con Fidel y Raúl Castro al frente, junto a personalidades como Ernesto «Che» Guevara, lleva más de 60 años al mando de la isla caribeña, continuando con su característico régimen socialista castrista, contando con Miguel Diaz-Canel al día de hoy como presidente de estado.

Dicho régimen, en sus comienzos, fue acentuadamente duro con la comunidad LGBTQI+. Esto lo vemos reflejado en comentarios que los referentes de la revolución dejaron en sus legados.

Entre tantos dichos, se destaca la concepción del «Che» Guevara a los homosexuales, donde los señalaba como «pervertidos sexuales», además de dejarnos declaraciones como «El trabajo los hará hombres». Contundentes comentarios que evidentemente nos dejan, al menos, un entender sobre cual era la postura del guerrillero cubano sobre los homosexuales.

Sin embargo, tras años de la revolución, y tras la muerte de Fidel en 2016, la entelequia de país que tuvieron los guerrilleros de la década de 1950 fue desmoronándose. La modernidad, junto a factores meramente exógenos, hicieron que el gobierno de la isla deba amoldarse a nuevas circunstancias y dejar atrás viejos ideales.

La aprobación del matrimonio igualitario en la isla, con un 67%, es claro ejemplo del avance que la modernidad efectúa en Cuba, demostrando que el gobierno debe dar el brazo a torcer y recibir nuevas modificaciones.

Los datos ya se dan por irreversibles, pese a que aún resta concluir el recuento en algunas circunscripciones, sitúan el nivel de participación cerca del 74%, más bajo aún que el referendo realizado en 2019 por la nueva Constitución.

El anuncio de los resultados coincidió con una reunión encabezada por el presidente Díaz-Canel para examinar la evolución del huracán Ian y tanto el mandatario como el resto de asistentes aplaudieron tras la confirmación de la victoria del «SÍ», como consta en un vídeo difundido en redes sociales por la propia Presidencia, bajo la premisa de que «el amor ya es ley» en Cuba.

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