Violento asalto comando en Rosario: un policía lucha por su vida tras ser baleado en la cabeza mientras custodiaba $35 millones
En la mañana de este viernes, el barrio Fisherton, en la zona noroeste de Rosario, fue escenario de un violento robo comando que terminó con un oficial de la Policía gravemente herido. Cuatro delincuentes interceptaron un vehículo que trasladaba $35 millones pertenecientes a una empresa local de golosinas, disparando al agente que custodiaba el dinero. El hecho ocurrió en la intersección de las calles Ambrosetti y Benegas.
El oficial, identificado como Andrés Arturo F., de 41 años, fue trasladado de urgencia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) con heridas de bala en la cabeza y el tórax. Su estado es crítico, según informaron las autoridades médicas. Andrea Becherucci, directora del HECA, brindó detalles en una conferencia de prensa: “Su estado es crítico, muy crítico. Están los equipos trabajando con él para estabilizarlo. Tiene heridas muy graves”.
El asalto ocurrió alrededor de las 8:30 de la mañana cuando los delincuentes, a bordo de un Ford Focus, interceptaron el vehículo en el que viajaba el policía junto al contador de la empresa. Los criminales, armados y actuando con extrema violencia, obligaron a los ocupantes a detenerse antes de perpetrar el robo. Tras hacerse con el botín, uno de los delincuentes disparó a quemarropa contra el agente antes de huir.
Minutos después del ataque, efectivos de la Policía de Acción Táctica encontraron un Ford Focus gris abandonado a unos 100 metros del lugar, en la esquina de las calles González Sabathié y González del Solar. El vehículo, que tenía pedido de captura por robo desde el pasado lunes, está siendo investigado por la Fiscalía para determinar si fue el mismo utilizado en el asalto.
El subdirector de la Unidad Regional II Mariano Gobi dijo en Canal 3 que desde la Policía de Santa Fe “rezan por la evolución” del uniformado. “Convocamos a su familia. Nosotros trabajamos ahora haciendo una saturación en la zona en la búsqueda de los asesinos”, añadió.
La Unidad Fiscal de Flagrancia dispuso la intervención del gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones para llevar adelante las pericias en el lugar del robo, incluyendo el levantamiento de casquillos y plomos, y el relevamiento de las cámaras de seguridad cercanas. También se ordenó una pericia exhaustiva sobre el Ford Focus incautado, que podría ser clave para identificar a los autores del ataque.
Este nuevo episodio de violencia en Rosario, donde las bandas criminales han intensificado sus operaciones, vuelve a poner en evidencia la creciente inseguridad que afecta a la ciudad. Las autoridades aseguran que están trabajando intensamente para esclarecer el hecho y llevar a los responsables ante la justicia. Mientras tanto, la comunidad policial y la ciudadanía siguen con preocupación la evolución del estado de salud del oficial Andrés F., cuyo pronóstico es reservado.
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