Un beso al volante y un accidente en Rosario: el insólito choque entre un colectivo y un camión

Un beso al volante y un accidente en Rosario: el insólito choque entre un colectivo y un camión
Un instante de distracción que pudo haber sido fatal. Un colectivo y un camión protagonizaron un choque que dejó serias consecuencias materiales en barrio Belgrano, Rosario.
Una distracción peligrosa
Este lunes 28 de octubre, Rosario vivió un episodio insólito cuando un choque entre un colectivo y un camión de gran porte terminó en un complejo deportivo. El accidente tuvo lugar en barrio Belgrano, donde un camión perdió el control tras el impacto y se incrustó en una cancha de fútbol, donde había niños jugando.
Afortunadamente, nadie resultó herido. Las vallas publicitarias y una columna de alumbrado público amortiguaron el golpe, impidiendo una tragedia mayor. Sin embargo, parte de la cabina del camión quedó dentro de la cancha. Testigos relataron que el accidente causó un gran susto, ya que suele haber espectadores sentados en reposeras cerca de la zona del impacto.
Testimonio de la encargada del complejo
En declaraciones a medios locales, una encargada del complejo comentó el momento del choque: “Fue una explosión que parecía de película.” Luego, llevó calma a los padres, aclarando que los menores estaban a salvo y que el camión solo dañó una bicicleta. “Un susto con suerte”, resumió la mujer sobre el incidente.
Un beso fuera de lugar
El accidente, según testigos, se debió a una imprudente distracción del conductor del colectivo. Una pasajera declaró que el chofer se distrajo besando a otra pasajera que había subido sin pagar boleto. Esto provocó que el colectivo rozara la puerta del camión, causando la pérdida de control del vehículo pesado.
Por su parte, el conductor del camión, quien sufrió algunas lesiones leves, explicó que perdió el control al ser golpeado por el colectivo mientras circulaba en Avenida Pellegrini.
Lo que pudo haber sido una tragedia quedó en un incidente sin heridos graves gracias a la intervención de las vallas de seguridad. Este suceso deja una advertencia sobre la responsabilidad al volante, especialmente en el transporte público, donde los pasajeros confían su seguridad al profesionalismo de los choferes.